Oigo Patria tu afición
No sé quién era el rapsoda de mi infancia, pero tal día como hoy, con voz de cursilito patriótico, desparramaba en el encerado el poema Oda al Dos de Mayo de Bernardo López García; en un silencio sepulcral, amenazado por el vuelo de la chasca, solo interrumpido por los suspiros y sollozos, -“y escucho el ...