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El PSOE de Rincón de la Victoria llevará al próximo pleno una moción para impulsar un Plan Integral de Accesibilidad Urbana y Movilidad Peatonal 2026-2029, una hoja de ruta que pretende eliminar barreras arquitectónicas, redefinir los itinerarios peatonales y garantizar que el municipio sea plenamente accesible para mayores, familias y personas con movilidad reducida o discapacidad.
El portavoz socialista, Antonio Sánchez Fernández, alertó de que la localidad “arrastra desde hace décadas carencias graves en accesibilidad”, citando aceras estrechas o deterioradas, bordillos sin rebajes, pasos de peatones sin señalización podotáctil y paradas de autobús que no cumplen los estándares mínimos. “La accesibilidad no es un lujo ni una opción; es un derecho y una obligación legal que el Ayuntamiento debe garantizar”, apuntó.
Diagnóstico, calendario y financiación
La propuesta plantea la elaboración de un diagnóstico técnico exhaustivo, un calendario de actuaciones prioritarias a cuatro años y una evaluación anual de los avances. El plan se nutriría de financiación municipal complementada con subvenciones autonómicas, fondos europeos y apoyo económico de la Diputación.
Entre las actuaciones previstas figuran el rebaje de bordillos, la ampliación de aceras, la instalación de pavimento podotáctil, la mejora del alumbrado y la señalización accesible, así como la creación de itinerarios peatonales continuos y seguros.
Oficina Municipal de Accesibilidad y participación vecinal
La moción contempla también la creación de una Oficina Municipal de Accesibilidad, que se encargaría de coordinar los proyectos, gestionar incidencias y desarrollar un mapa digital de barreras arquitectónicas para que los vecinos puedan señalar puntos críticos en sus barrios.
El documento propone además un sistema estable de participación ciudadana, con la implicación de asociaciones de personas con discapacidad, colectivos de mayores, AMPAs y entidades sociales. “La accesibilidad no puede seguir parcheándose; hay que planificar con rigor y visión de futuro. Cada obstáculo urbano es un límite a la libertad de nuestros vecinos”, defendió Sánchez.
El portavoz socialista insistió en que esta perspectiva debe incorporarse a cualquier obra municipal: “No se puede aprobar ni una sola actuación sin asegurar el cumplimiento de la normativa de accesibilidad universal. Cada proyecto que no contemple esta mirada es un retroceso para el municipio”.
