El Gabinete de Estudios de la Naturaleza (GENA), asociación no gubernamental sin ánimo de lucro que se dedica al estudio y cuidado de los recursos naturales, el medio ambiente y la biodiversidad de la Axarquía, trabaja para promover el desarrollo sostenible y la protección de los valores naturales de esta comarca.
El GENA ha presentado una denuncia ante la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural señalando el daño producido tras las obras de dragado del cauce del río Vélez. Dichas obras se han realizado con el objetivo de extraer materiales para construir defensas y evitar inundaciones en la margen izquierda del río Vélez.
En 2017, a petición de la Junta de Compensación de la Unidad de Ejecución UE-2 del Sector de Planeamiento SUPT-12 del PGOU de Vélez-Málaga, en coordinación con el Ayuntamiento de Vélez-Málaga, se llevó a cabo un estudio hidráulico del tramo final del río Vélez y cómo afectaba a dichos terrenos.
Más adelante, a comienzos del año 2020, el Ayuntamiento veleño y la Cuenca Mediterránea andaluza redactaron el Proyecto Ordinario de Urbanización de Motas en la margen izquierda del río Vélez, para contrarrestar la inundabilidad de Torre del Mar . También un nuevo camino para llegar al camping,
GENA advirtió entonces de ejecutar motas también en la margen derecha para evitar riesgo de inundación y que en caso de que esta si defensas se realizasen dragando el terreno, podría tener efectos negativos en la biodiversidad de las márgenes fluviales.
Y el tiempo les ha dado la razón a los ecologistas ya que el dragado del tramo del cauce del río Vélez desde El Capitán hasta el viaducto de la N-340, ha sido de una intensidad considerable, rebajándolo en una altura variable de entre uno y tres metros respecto el cauce primitivo.
Este rebaje del cauce ha provocado una desconexión más o menos importante entre la vegetación de la ribera y el aluvial, lo que alejó el aparato radicular de los álamos blancos (Populus alba) y otros árboles, como eucaliptos respecto del nuevo nivel de la capa freática del acuífero detrítico del río Vélez.
Derivado de ello e incrementado por la sequía, los álamos han ido perdiendo vitalidad hasta morir, algo ocurrido en el tramo entre El Capitán y el viaducto de la N-340. GENA sostiene que los árboles no han muerto solo por la sequía ya que en los tramos del río donde no se ha rebajado el cauce no se ha recogido similar mortandad que en dicho tramo.
